lunes, 4 de agosto de 2008

El puñal y el corazón

Ok, ok... jamás creí que fuera a usar esta canción como título de ninguna entrada, pero la tentación -y la risa- me vencieron. Y es que la frase realmente resume mi fin de semana... fuí al evento de "La flor de lis más grande del mundo", que coincidió con una manifestación en contra de la homofobia. Espero que entiendan mi punto.
El punto es que no comparto la euforia que mucha de la gente tenía durante este fin de semana. El evento me pareció no un asco, pero sí patético. Me fascina la idea: juntar miles de latas de aluminio vacías, aplastarlas y formar con ella un símbolo de unidad mundial, venderlas y donar el dinero a alguna institución que le de un buen uso. Matas dos pájaros de un tiro: reciclas y ayudas a alguien más. ¡Genial! El problema es que los organizadores dan el evento y sus detalles por sentado y las muchas fallas resultan frustrantes e inclusive peligrosas.
Formé parte del "Staff", me dieron mi playera (un nuevo trapeador para la cueva) y mi gafete con gadget para usarlo con USB o celular. Llegamos al Zócalo a las 7:50 -tarde a la cita de 7:30- y buscando a nuestro "jefe" observamos el izado de bandera... el "patrón" llegó a las 8:30... gracias. Entre dires y diretes el chavo este no sabía bien bien qué rayos hacíamos ahí y en sendas ocasiones otros "abusados" nos relevaron de nuestro trabajo. Perdimos el tiempo en muchas ocasiones y eso ocasionó que al día siguiente sólo llegáramos 5 personas (de las 26 que éramos).
El domingo fue cuando más cuenta me di de los problemas de esto, y tengo básicamente una queja. ¿Para qué rayos quieren tanto "staff" si, de verdad, no lo emplean? Especialmente en seguridad. Cuando recién había llegado yo el domingo, platicando con el tío este, me comentó que después de la "flor" venía el "pateado de latas" y que éra divertidísimo. Otro fulano afirmó que lo más divertido de todo era la cantidad de gente que llegaba a los servicios médicos y de emergencia... con cortadas de latas, latas enterradas y hasta ¡patadas en la cara! (noten el sarcasmo). El punto es que después de que se forma la "flor" y hacemos el circulo, la gente patea las latas hacia el centro en "una demostración de euforia por haber cumplido la meta" y luego las avienta al aire -no todas, pues eran poco menos de millón y medio-, y acto seguido, se oye en el micrófono anuncios apelando a los Jefes de Tropa que busquen a sus chamacos en el servicio médico.
Pero antes de eso está la parte donde se transportaron los costales abarrotados de latas desde la "Zona de Montaña" hasta el resto de la plancha. Y el punto es que a la gente -y a los organizadores- les vale un pepino quién está participando de ese lanzadero de costales, y no falta el chamaco baboso que, haciéndose el chistoso lanza un costal lo más lejos que puede, o hacia la cara de una chava. Yo presencié varias cortaduras y accidentes, varios de ellos inocentes, pero otros tantos fueron casos claros de incompetencia y falta de supervisión.
¿Por qué rayos te insisten en los cursos que preveas la seguridad si es lo primero en lo que ellos son negligentes?
En resumen, la actividad tiene una proyección positiva, un potencial inmenso y una imagen genial. Eso viéndolo desde afuera. Desde dentro me di cuenta de que hay que tener cuidado... si se pudre la manzana por dentro en una de esas alguien la muerde y se envenena.
Por otra parte, quisiera mandarle una dedicatoria a la madre de Marcelo Ebrard: ¡¿cómo se le ocurre?! Uno diría que la marcha en contra de la homofobia no choca con el evento, y que los muchachos de todas edades deben conocer el mundo y la realidad de éste, y es cierto... pero sí tengo un muy serio problema cuando se les reparten condones a niños de 10 años o menos y se habla por el micrófono de sodomía, "coger por el culo", "lamer vaginas" y esas cosas en un evento lleno de niños. ¡Por favor! Que no se le olvide a la gente que su libertad termina donde empieza la del prójimo y que el respeto al derecho ajeno es la paz. Ellos hablan de libertad de expresión, de derecho de amar y de otros tantos derechos con los que estoy de acuerdo... pero yo les hablo del derecho a la inocencia, y sin cuidado la inocencia muere con pocas palabras... de verdad. Ojalá alguien entienda mi punto.
A final de cuentas, y a pesar de todo, sí me divertí... pero no porque "las latas" estuviera padre, sino, como siempre, por los amigos.
A las tres todos gritamos como degenerados y corremos hasta la esquina. Uno... dos... ¡tres!

2 comentarios:

paulina dijo...

querido amigo:
totalmente de acuerdo con tu punto de vista del evento y si efectivamente si comes la manzana te puedes envenenar ,literal jeje.
la vdd realmente lo que nos mantuvo ahi fue la parte social el rencuentro con los 88ers hehe lo unico 100% rescatable del evento y los extras como " la casa de la abuela" de abo....
me diverti mucho y lo mejor es que en las buenas y en las peores como los costalasos estan los amigos no....
te quiero mucho y espero que nos veamos pronto y ya sabes en toluca tienes tu ksa
tqm

pau (tolucaaaaaaaaaaaaaaaaaa)

pd: estoy pensando seriamente lo del sector oculto 88 hhahah hasta con la bandera salimos hehe)
pd2: que bueno pertenecer al coro the lion king hehehe

Montse Guada dijo...

Mi querido Poncho:

La inocencia, la igualdad, las cosas que nos enseñaban los niños ya nosotros debemos enseñárselas.

¡No inventes con el /&$%#$%# evento! Ese wey merece que lo cuelguen de los huevos y definitivamente esta ciudad a veces necesita un perro loco al cual soltarle la correa.

Al menos estuvieron ustedes ahí.
Entiendo lo de los eventos y lo de la inocencia.

Todavía habemos personas que peleamos por ello... por eso ¡Viva Batman y la JLA!

Uno, dos, tres... ¡córrele que acabo de tocar el timbre!

P.d. La hora está llegando.